martes, 26 de julio de 2011

Deberes de fin de semana

Por fin, tras once largos meses de lluvia y oscuridad (realmente fueron 10 y medio) por fin empiezo las vacaciones (nubladas aunque al menos sin lluvia). No tengo muy claro todavía cuándo tengo que incorporarme pero la verdad es que hoy no me importa en absoluto.

Durante estos últimos tres días y con motivo del puente en media España, he aprovechado para hacer una escapada que perseguía varios motivos:
  1. Comprobar que el sol sigue existiendo y que no se ha consumido como puede dar la impresión por esta parte de la península. Han hecho falta 200km y 2 peajes para comprobar que sí, hay sol en algún lado por encima de esa capa de nubes taaaan espesa que no sale de encima de nuestras cabezas desde invierno (aproximadamente). Incluso he experimentado esa extraña sensación de estar en la calle por la noche y poder permanecer en manga corta.
  2. Intentar sobrevivir sin internet durante 3 días (tengo que mentalizarme de que puede que no tenga conexión en mi próximo lugar de destino). El resultado final ha sido satisfactorio, no he intentado robarle a nadie su móvil con conexión a internet, ni he tenido que llamar por teléfono para que me miraran el correo o me compraran un billete a última hora que me había dado cuenta que no tenía.
  3. Buscar alojamiento a un gato precioso que por motivos que no vienen al caso, ahora disfruta alegremente de un jardín enooorme en el que de tanto correr tendrá que hacer incluso un pit-stop para recuperar energías.
  4. Reunión familiar: tanto con familia de esa que te cae bien aunque mentalmente te agote, como con esa parte añadida a la familia a la que a veces te imaginas abofeteando al más puro estilo AllyMcBeal
Ahora con los deberes del fin de semana terminados, el maletero por fin descargado (incluyendo ropa, cacharrada varia y víveres que tu abuela te manda por miedo a que te quedes sin comida durante 4 meses en medio de la autopista), me dispongo a arreglar detallitos para irme de vacaciones. Entre otras cosas creo que debería de ir imprimiendo el billete, comprobar que tengo todas las tarjetas y carnets al día (no vaya a ser que me detengan en la aduana), ir en busca de mi maleta (perdida entre un montón de trastos en el denominado "trastero") y dejar los deberes hechos para que cuando llegue en septiembre esté todo en su sitio --> más vale prevenir que llorar en pleno síndrome postvacacional.

Sólo me queda ir a rezarle a Santa Clara para que el domingo evite cualquier tipo de huelga de Aena, estas a las que últimamente nos estamos acostumbrando ya que se les da por convocarlas el día que te tienes que ir de vacaciones (el año pasado libré por un día, pero en esta ocasión con eso de irme justamente el 31, miedito me dan). Realmente no sé si es Santa Clara la que se encarga de este tipo de trabajos o ella sólo lleva el tema de las lluvias en el día de las bodas o comuniones. En fin, que si no es de su departamento, espero que le pase la petición a quién corresponda.

lunes, 18 de julio de 2011

Operación salida, operación retorno, operación bikini = ¡Operación Vacaciones!

En el telediario no se esucha otra cosa que operación salida para arriba, operación retorno para abajo, operación bikini... Es decir, que por si alguien no se había dado cuenta, estamos en plena época estival.

Llegados mediados de julio se supone que todo el mundo está de relax, disfrutando del buen tiempo y relajándose en la piscina/playa/montaña/al gusto del consumidor. Y sí, oficilamente llegan las vacaciones, al menos en cuanto al calendario laboral de mucha gente se refiere (--> y esa "mucha gente" no me incluye todavía a mi, pero falta poco).

Saqué ropa de verano para las estanterías del armario (hará un mes) y ahora me vuelvo a plantear sacar de nuevo más ropa (en este caso la de invierno, porque mientras la mitad de la Península se torra, en la otra mitad hoy vamos con paraguas y botas de lluvia). Hice planes para el mes de agosto y parte de septiembre (lamentablemente los de septiembre se han visto modificados en contra de mi voluntad), pero me había olvidado de lo más importante de todo y que es lo que da oficialmente el pistoletazo de salida a las vacaciones: empezar con los preparativos para poder abrir el blog en vacaciones. Y con respecto a esto debo confesar desde lo más profundo de mi alma (si es que un año me ha dado para filosofar mucho) que :

a) Me avergüenza no haber recordado que existía este blog hasta que alguien me preguntó por él (uno de esos fieles lectores que leen aunque luego no comenten).
b) Me avergüenza también el haber visto que el año pasado lo dejé de escribir a medias (justamente un 15 de agosto, por lo visto). Confieso que en su momento tenía intención de continuar escribiéndolo una vez volviera a España y actualizar los últimas días, pero al final la pereza (como me sucede muchas veces) pudo conmigo y simplemente lo abandoné.

Así que casi un año después me encuentro con la situación siguiente:
  1. No colgué el carte del "cerrado por fin de vacaciones"
  2. Al dejar esto abierto y con las persianas levantadas he corrido el riesgo de que un okupa entrara en mi blog y se instalara para siempre -->; y según lo que se ve en la televisión para echar de tu casa a alguien que se instala de forma fraudulenta pasará como mínimo un año de continuas demandas judiciales.
  3. Lo reconozco, soy una persona imprudente donde las haya (sí, de esas que deja las cosas guardadas debajo de la toalla cuando se va al agua, como si la toalla tuviera un poder de caja fuerte que mantiene alejados a los ladrones).
En fin, que afortunadamente no ha pasado nada. Así que borrón y post nuevo, empiezan los preparativos para un nuevo periodo de descanso veraniego, y eso es lo que cuenta. ¿El destino escogido esta vez? Pues de nuevo la Casa de la Puerta Azul.

PD. Fieles y/o eventuales lectores, lamentamos las disculpas que la interrupción de noticias previas en el pasado les haya podido ocasionar. Esperamos mejorar la calidad de nuestras informaciones en un futuro inmediato.